domingo, 6 de agosto de 2017

El Folclore 
(Primera Parte)

El término folclore, es tan amplio que abarca todo aquello que es compartido por la población y que suelen transmitirse, de generación en generación. El folclore de un pueblo puede ser esencial para entender la forma en la que ha vivido, y como fue surgiendo la estructura social que ha llegado hasta nosotros.

El folklore local comprende y distingue la identidad propia de cada pueblo, y dentro de él pueden distinguirse al menos cuatro formas o estados de desarrollo, el reciente, el vivo, el moribundo y el muerto.
Resulta difícil conocer en que estado se encuentra el folclore de Villa del Campo, ya que ninguna de ellas lo define con claridad, particularmente lo situaría entre el reciente y el moribundo, por entender que esta próximo a ambos. Son muchas las tradiciones que se han perdido, y hay otras que aunque un tanto descafeinadas, siguen presentes, no se pretende aquí enumerar todas las tradiciones perdidas, ni culpar a nadie de desvirtuar las presentes, tan solo se intenta barrer bajo las alfombras y desenterrar lo que pueda ser desenterrable para tratar de perpetuarlo, mostrando el valor de sus raíces.

De donde venimos, no cabe duda que tuvimos dependencia Leonesa, en el seno de su reino nacimos y de él bebimos, no en vano enfundarse el traje típico, en Villa del Campo se denomina vestirse de Charra, extinguido el reino Leones, la correspondencia con Castilla fue constante y en estribillos hay vivas muestras de ello “¡Viva Segovia! / ¡Viva Segovia! / En Villa del Campo / tengo la novia”. Y sí miramos los Cancioneros Populares de otras regiones encontramos multitud de similitudes con zonas no tan limítrofes.

Dentro de las gamas que abarca el folclore suele sobresalir la música y el atuendo, y  conjuntamente, ambas intervienen en las manifestaciones sociales, festivas y religiosas, motivo  por el que suelen ser las más llamativas y vistosas
La indumentaria 
Dada la variedad y peculiaridades de la indumentaria que atesoran los pueblos Cacereños, resulta imposible unificar un atavío representativo a nivel regional, y mucho menos provincial, a lo sumo unos sobresalen más que otros, pero todos llevan un valor añadido que los hace singulares. Por otro lado, es lógico y  razonable que a ciertas conmemoraciones o actos oficiales sea menester enviar representación provincial, ataviada con la indumentaria tradicional y que en ellos se aluda a los representantes y a su localidad como embajadores provinciales en lugar de representativos de ella.  (No son pocas las veces que estatal y particularmente se ha intentado presentar de manera unificada el traje típico provincial, siempre con el mismo resultado, hermosísimas estampas, llenas de luz y colorido pero carentes de representación, son innumerables las referencias a dicha indumentaria en postales, almanaques, filatelia, carteles de ferias, cupones de ciegos, productos farmacéuticos, barajas de cartas, publicitando fajas, caramelos, cajas de cerillas, chocolates, jabones, cromos, pipas de girasol, y un sin fin de temas). En este tipo de actos, de un tiempo a esta parte, y no sin méritos propios, se viene imponiendo la indumentaria de Montehermoso, que cuenta con una enorme tradición muy unificada en su conjunto, que le han dado cierta situación de privilegio frente a otros pueblos de arraigado atuendo, no en vano hay detalles característicos, capaces de dar giros inesperados y de manera involuntaria verse favorecidos frente a otros de idéntica calidad, y uno de esos involuntarios detalles encumbró a Monterhemoso más que su ya afamado traje, cierto que antes de que se produjera el citado giro, Montehermoso ya gozaba de prestigio provincial, puesto que una representación Montehermoseña ataviada con sus mejores galas fue enviada en 1878 a la Real boda de Alfonso XII y Maria de las Mercedas y con su atuendo bailaron sus sones delante de sus Reales Majestades, y como queda patente en las fotografías de J. Laurent y artículos del evento, el detalle que no es otro que la hoy famosa Gorra ni estaba ni formaba parte del atuendo, tuvieron que pasar 39 años para que se viera reflejada en el cuadro que la inmortalizó. Según acreditadas publicaciones, como las de Valadés Sierra (Revista de Dialectología y Tradiciones Populares) y las más cercanas de Juan Jesús Sánchez Alcón en http://montehermosocultural.blogspot.com.es
En 1917 (justo hace 100 años) Joaquín Sorolla recorría Extremadura buscando un enclave representativo de Extremadura, para el encargo de la poderosa Hispanic  Society of America sobre las regiones de España y estando en Plasencia vio que al mercado de los Martes acudía gente ataviada con un llamativo sombrero o gorra, lógicamente eran Montehermoseñas con traje de faena que incorporaban el tocado para cubrirse del sol, y decidió que era lo que buscaba, se desconoce si Sorolla conocía o no la indumentaria de gala de Montehermoso ya que lo que Sorrolla vio en el mercado de los Martes de Plasencia era el atuendo ordinario, y de este, la Gorra fue lo que más capto su atención, buscó un encuadre que encontró junto al puente de Trujillo y aunque la Gorra no formaba parte del atuendo de gala, Sorolla la inmortalizo sobre el lienzo, y como tal llegó a su destino, la biblioteca que la citada Sociedad tiene en Nueva York, el cuadro fue un éxito y a raíz del hecho se fue creando la leyenda de la gorra de Montehermoso,  y lo que Valadés Sierra llama o denomina la tradición inventada, ya que ni la antigüedad ni los usos de la Gorra se correspondían con la realidad. (Es impensable que una mujer llevase un cartel en forma de espejo, roto o no, pregonando el estado social en que se encontraba, el uso del espejo era mucho más sencillo, y tan solo tenia la función del coqueteo o propio acicalamiento antes del regreso al pueblo tras las duras faenas, antes de llegar al pueblo se miraban en el espejo y se arreglaban en la medida de lo posible, algo que no se le puede negar a ninguna mujer).
El interés por los modelos y patrones culturales comarcales, que utilizo Sorolla dentro y fuera del cuadro dedicado a Extremadura, creció rápidamente, la Hispanic  Society of America vio en la zona un enorme potencial en estado puro y de paso convirtió a Montehermoso en lugar de visita indispensable y aunque cuando en 1928 Matilda Anderson visito la zona, ya se habían iniciado ciertas modificaciones, (en 1920 aparece un articulo de José Ortega Munilla ilustrado con fotografía de Montehermoseñas ataviadas con gorras) estas aun no alcanzaban a alterar a su gente, además de recoger ciertas cuestiones comunes en los pueblos de la zona (no propias de Montehermoso), Matilda principalmente centro su gran trabajo en la indumentaria, quedando este reflejado en innumerables fotografías, 10 de ellas aparecen en “Extremadura Costume: Women's Festival Dress at  Montehermoso Cáceres”. También desde dentro creció el interés, no fueron pocos los artistas que plasmaron la belleza y pureza de los trajes y costumbres entre ellos el fotógrafo José Ortiz Echagüe. Matilda Anderson volvió años más tarde, entorno a los años 50, lo que indica que aun quedaba materia y zonas que explorar.
La actual indumentaria tradicional de Villa del Campo, (por decir algo) se asemeja a la Salmantina, de hecho vestirse con dicho traje aquí es conocido como vestirse de Charra, quizás como dice Valadés Sierra sea fruto de la tradición inventada, lo cierto es que los lazos con las tierras Salmantinas en especial y con el resto de las Castellano Leonesas, desde siempre fue muy amplio, no hay que olvidar que todo indica  que el Campo fue poblado con gente desplazada de la Rivera del Coa, hasta entonces territorio Español, y relativamente próximo a Ciudad Rodrigo, queda claro que de aquella época no proceden los trajes, pero el potente trasiego posterior con las tierras del vino y el pan, bien pudo introducirlo. (Uno de los medios que más expandió el cruce o intercambio de culturas fue la trashumancia y los arrieros y en el Campo no faltaron ninguna de las dos cosas, trashumancia hubo mucha y el Campo llego a contar con casi cien cabezas de familias dedicadas a la profesión de arrieros).

De un tiempo a esta parte, se tiende más a uniformar y seguir modelos de patrones copiados, algo que a mi entender, en nada le beneficia, todos sabemos que las modas o costumbres llegan o se instalan en determinados puntos y épocas y que en ellos pueden experimentar transformaciones y retornar o emprender otro camino ya transformadas, todo ello de manera natural, como ha sucedido siempre, es por tanto que no creo que la actual tendencia unificadora sea la correcta, y me inclino a un modelo más diverso o heterogéneo, algo más propio, basta con ojear algunas fotos antiguas en las que dentro de un estilo, las mismas prendas faldas, blusas, mandiles, chalecos, pañuelos, etc. etc. eran diferentes entre sí, esto es algo que probablemente nunca se llegue a constatar, sin embargo no deja de ser cierto y me pregunto sí hay alguien capaz de imaginar el tesoro que albergan y guardan los baúles del Campo, yo sí, es más, lo creo, aunque no por ello dejo de hacerme más preguntas, ¿Habrá algún día, voluntad suficiente, para promover y desempolvar tanto tesoro oculto? La respuesta es un NO rotundo, lamentablemente nadie moverá un dedo y estos verdaderos y variados tesoros locales, seguirán ocultos hasta que el implacable paso del tiempo, los lleve a su estéril descomposición.

No corren los mismos tiempos, ni circunstancias que puedan dar un giro tan inesperado como el de la gorra de Montehermoso, pero mientras no salgan a la luz esos tesoros, localmente no se podrá hablar con propiedad, de lo que llamamos vestirse de charra.

































Fotos cedidas por Antonio. P. G. y Julian. G. N.

La música
La enorme publicidad que la Hispanic  Society of America  dio a la zona causó un enorme interés en Norteamérica que deseosos de tradiciones se lanzo a recopilar su enorme riqueza musical.
A comienzo de la década de 1930, Kart Schindler, Alemán afincado en Nueva York, recorrió parte de Extremadura con algo nunca visto, un gramófono marca Fairchild Aerial Company, que grababa en discos de aluminio, el trabajo fue publicado en 1941 bajo el título de  “Música y poesía popular de España y Portugal” (Folk Music and Poetry of Spain and Portugal,).
Ya en 1952 le siguió Alan Lomax, “Spanish Recordings Extremadura” y “Collection Folklore de Extremadura”

A nivel nacional fue Bonifacio Gil García quien presento en 1931 el primer tomo del “Cancionero Popular de Extremadura” de escaso contenido Cacereño, le siguió el Placentino, Manuel García Matos. Consciente del peligro que sobre la música tradicional se cernía, el gran musicólogo García Matos realizo una fructífera recopilación de temas musicales que de no haberlo hecho sin duda se hubieran perdido para siempre, por tanto es a él a quien debemos que aunque un tanto olvidadas aún podamos conocerlas y escucharlas, para un mayor conocimiento de sus valiosos propósitos, aprendió y dominó el tamboril y la flauta de tres agujeros.


García Matos conocía el amplio abanico de grandes tamborileros repartidos por toda la alta Extremadura y de algún modo estableció su cuartel general en Montehermoso entablando gran amistad con el gran tamborilero Antolín Garrido, aunque sin duda el resultado habría sido idéntico con cualquier otro, dada la alta profesionalidad de todos ellos, una vez más funciono la química entre Plasencia y Montehermoso, como todas las cosas, esto tenia sus ventajas y desventajas, por un lado estaba el efecto llamada y por otro restaba meritos al resto de localidades, ya que en líneas generales había muchos sones idénticos y comunes en las diferentes poblaciones y salvo que las diferencias fueran muy notables, anotaba y registraba los escuchados en  Montehermoso que es donde estaba más tiempo, aun así el Campo que tenia como informante al gran tamborilero Paulino Bonilla, (Tío Paulino el Tamborilero) no salio mal parado, del Campo se llegaron a registrar unos cuarenta sones y canciones con sus respectivas partituras (posiblemente haya más en las anotaciones del autor no publicadas) algunas de carácter único, en otros casos se valoraron positivamente sus variantes y se incluyeron como referencia o alternativa y es en este campo musical donde Villa del Campo cuenta con más bazas positivas, aquí no hay que reinventar la historia ni aplicar la tradición inventada, el Campo cuenta con canciones propias y otras cuya única referencia solo en el se recuerda, aquí sí se podría dar, o abría lugar para un sonoro e inesperado giro que se oyera en todo el mundo.

              No cabe esperar grandes sorpresas, pero por si acaso, ya se han dado pequeños pasitos.
¿Que se va a hacer en Villa del Campo con lo recientemente hallado?, NADA, absolutamente nada, abecés me da pena tanta pasividad, otras, ante tanta indiferencia en todos los ámbitos y sentidos, es vergüenza ajena lo que me invade.
Como ya se ha dicho, no hay antigüedad inventada, entre otros por aquí pasó la Real Comitiva de Maria Manuela de Portugal camino de su boda con Felipe II. La Bautina es única tanto en nombre como en contenido y que decir del baile de la Rua, es aquí donde únicamente hay rastro de el, Villancicos, Romances y un largo etc, alguien conoce un crucero Armas Christi semejante a la Cruz del Alto, o un doble Sepulcro Mural en Nicho de las características del de Villa del Campo, alguien cuelga en su pared un escudo imperial como el del Ayuntamiento.
Sí un precioso sombrero, que pudo proceder de la evolución de sombrero de Capota, alcanzo tan altas cotas, que no podría hacer este conjunto, para ello habría que darse a conocer, y no permanecer parado, viendo como año tras año, caen al suelo las hojas del árbol.


(Segunda Parte)

Canciones de Villa del Campo recogidas por Manuel García Matos entorno a 1940 y publicadas en el "Cancionero Popular de la Provincia de Cáceres" y "Lírica Popular de la Alta Extremadura".

                                         Melodías del Catalogo de Manuel García Matos
       "Cancionero Popular de la Provincia de Cáceres"

Melodía Nº 10 
El niño perdido (Villancico)
El niño perdido se fundamenta en la escritura del Niño Perdido y hallado en el Templo, para desde ella formar el Villancico que a todas luces termina en la celebración de la Noche Buena. Sobre el mismo tema hay otras versiones, pero esta se tuvo  siempre como muy Campusa, allá por la década de los 80, en una feria del libro en la Plaza Mayor de Cáceres encontré un libro que incluía Villancicos Cacereños y este se encontraba como propio del Campo. (El verso 18 termina "y de mi padre Jesús" cuando lo lógico es que diga José en lugar de Jesús")



                                                               Melodía Nº 31
                                                        Romance de las tres Cautivas

Romance muy extendido por toda España, lo cual lo hace muy meritorio que fuera recogido en Villa del Campo.

Melodía Nº 33
Las Señas del Esposo. También conocido como "Estaba la Catalina"
Otro romance super conocido, más puro que la versión posterior recogida en Arroyo de la Luz por Alan Lomax, incluida en“Spanish Recordings Extremadura”. 




Melodía Nº 67
El mi niño Lindo
 El mi niño lindo,
el mi niño guapo,
el mi niño lindo,
es un buen muchacho.

(Alo, ro, alo, ro,
alo, ro, alo, ro,
alo, ro, alo, ro,
que ya se durmió).
Melodía Nº 85
Como quieres que tenga contigo enojos
¿Como quieres que tenga
contigo enojos,
si eres la clavelina
de los mis ojos.?  (1)

(Con una guitarra, 
con un almirez,
con una pandereta,
que retumbe bien). (2)
(Bis) Se repiten los dos últimos versos.



Melodia Nº 96
Porque te quiero, mis padres me castigan con rigor

Melodía Nº 114
¿Como quieres que vaya de noche a verte?
Canción de quintos

¿Como quieres que vaya
de noche a verte,
si tienes la cocina
llena de gente?.

(Que resalada eres,
dame la mano
que la reina me lleva,
a ser soldado.
A coger los galones
para ser cabo).

Melodía Nº 116
Por cima de tu ventana


Melodía Nº 122
Señor Alcalde Mayor


Señor Alcalde Mayor,
no prenda usté a los ladrones,
porque tiene usté una hija
que roba los corazones.
(Olé y olé resalada) (3)
(3) (Repite el cuarto verso de la copla después del verso del estribillo).



Melodía Nº 189
Para que quieres majo los esquilones



Melodía Nº 205
Para qué madrugas tanto

¿Para qué madrugas tanto?
madruguerita del alma,
si sabes que yo te quiero
ni aun que estés en la cama.





Melodía Nº 208
El día de la Ascensión


El día de la Ascensión
vas a Misa con tu madre,
pareces la flor de lila
cuando la menea el aire.
(olé dueño mio y olé) (4)
(4) (Se repite el cuarto verso tras el estrivillo)




Melodía Nº 212
Arriba el limón


Singular canción muy extendida por todo el territorio nacional, que aquí presenta una importante variante subiendo el Limón y bajando la Lima ya que en el resto de versiones es "Arriba la Lima abajo el Limón" y la particularidad de que se menciona en una segunda canción local el día de la "Ascensión" lo cual indica que ese día debió ser muy importante para el pueblo.

Melodía Nº 227
Bautiná
Alborada al Cristo de los Desamparados
La Bautiná, que decir de la Bautiná…
Emblemática, misteriosa, simbólica, relevante, quizás ninguna de estas palabras defina el titulo de Bautiná, o tal ved tenga un poco de cada una de ellas.

Armónicamente, al igual que otras canciones de tradición local, en su contexto melódico, la Bautiná contiene más semejanzas al sistema oriental, que a las gamas de tonalidad menor, usadas en occidente y más propias de estas tierras.

Poéticamente  es octosílabo con rima asonante en los versos pares, de tres estrofas en sextetos, las dos primeras se fundamentan en simbologías y la tercera en hecho real.
La primera hace alusión a las Golondrinas que son guiadas con los rayos del sol anunciando las bondades de Cristo, (Además del simbolismo y sentimiento alegórico de los pueblos, las golondrinas forman parte del lirismo poético y tanto en la iconografía como en la literatura, fácilmente pueden verse golondrinas arrancando espinas, aliviando el dolor de Cristo).
La segunda a los lirios, (“Cristo de Desamparados hermoso y divino lirio”, el aspecto sereno y puro del lirio puede verse en infinidad de representaciones de Jesús) símbolos de pureza y mencionados como ejemplo en el Evangelio, “Considerad los lirios del campo, cómo crecen: no trabajan ni hilan; pero os digo, que ni aun Salomón con toda su gloria se vistió así como uno de ellos”.
Y la tercera en la promesa hecha por el Mayordomo.

Con intención o sin ella, dentro del contenido de los versos, pueden verse datos que describen el desarrollo de la Alborada, ya de entrada, antes de empezar a cantar, sitúa las voces cantoras en la propia ermita, donde probablemente hayan pasado la noche, Mayordomo y acompañamiento, y con los primeros rayos del sol, las golondrinas representadas en las voces femeninas que entonaran la Alborada, salen del Templo a cantarla.
Generalmente, las Alboradas eran cantadas por mujeres entorno al Santo en la procesión del amanecer, (El Cristo de los desamparados ha procesionado muy pocas veces, y parece obvio que no había procesión, si no canto de Alborada).
La segunda estrofa nos sitúa en plena acción de la Alborada, el Hermoso y Divino Lirio padeció martirios y fue crucificado por la redención de todos, y allí están una vez más las piadosas mujeres entonando sus alabanzas.


La Tercera muestra a las mujeres de regreso al Templo del Cristo, tras cumplir la promesa hecha por el Mayordomo, expresamente indican al Mayordomo, que vienen de cumplirle la promesa que el había ofrecido, por lo que puede entenderse que el mayordomo se quedaba en la ermita y no participaba de la Alborada.



Melodía Nº 251
La Pandereta


La Pandereta que toco
tiene un cascabel colgado
y más arriba un letrero
del galán que está bailando.


(Vengo del mar
vengo del río
vengo de la mar
busco al dueño mío.)




Sobre esta canción hay otra en plan erótico quizás también recogida por García Matos, sin que este la incluyera en el libro, no se transcribe aquí por no herir sensibilidades femeninas, ya que en dicha canción la Pandereta no es instrumento musical.

Melodía Nº 253
Eres Blanca Paloma (Son no Brincao)


Eres Blanca Paloma
de los jardines,
tus labios dibujaron
los serafines.

(Ay¡ madre, madre,
a mi amante le han hecho carabinero
por que lo vale.

Melodía Nº 256
Un pajarito de oro


Melodía Nº 261
En el cielo no hay faroles
En el cielo no hay faroles
Que todas son estrellitas,
para alumbrar a los padres
que tengan hijas bonita.

(¡Olé resalada y olé!) 5

5 Se repite el último verso después del de estrivillo.

Melodía Nº 270
Por cima de tu ventana

Por cima de tu ventana
por bajo de tu balcón,
hay una fuente que mana
agua de verde limón.

(Palomita blanca de Mayo,
dime la "verdad", "resalá",
yo te la diré, dueño mío,
a la noche cuando vaya).


Melodía Nº 312
Musica Instrumental A. Tocatas varias
A. Alboradas

Melodía Nº 316

Melodía Nº 321

Melodía Nº 223

Esta canción debe tener algo especial, a pesar de ser música de baile siempre viene especificada como La "María"

Melodía Nº 324

Algo similar a la anterior le sucede a esta.

Melodía Nº 330

Melodía Nº 331


Melodía Nº 332


Melodía Nº 333




Melodías del Catalogo de Manuel García Matos
 "Lírica Popular de la Alta Extremadura"


Melodía Nº 9
Eres morena y robas los corazones

Melodía Nº 40
Morenitas son las pulgas

Melodía Nº 41
Eres una ladrona que me ha robado todo

Melodía Nº 49

Melodía Nº 50

Melodía Nº 51

Melodía Nº 60

Melodía Nº 72

Melodía Nº 140
Alborada

Melodía Nº 141
Alborada

Melodía Nº 142
Alborada

Melodía Nº 147
Alborada



Y como colofón El baile de la Rúa, visto desde la magna presentación del musicólogo Manuel García Matos, con figurines de F.Lancho.









Otras Canciones recogidas en "Romances y Canciones en la Tradición Andaluza". Recogidas por Manuel Manrique de Lara en Algeciras a Hilaria Felipi natural de Villa del Campo, año 1916

Camina la Virgen Pura, Camina para Belén 

Este antiquísimo Romance o Villancico, (también conocido como "La Fe del Ciego, o El Naranjel") es conocido en todas partes, tiene innumerables versiones y variantes, en algunas de ellas la Sagrada Familia va de Egipto a Belén y en otras de Egipto a Nazaret, (en este caso no especifica de adonde viene, tan solo que camina para Belén) no parece que el destino de regreso fuera Belén, las escrituras indican que a Belén fueron a Empadronarse y las mismas escrituras muestran a Jesús como Nazareno, por tanto parece lógico que al regreso marcharan a Nazaret, en cualquier caso las acciones que representan están tomadas de los Evangelios Apócrifos y muchas de ellas parecen inverosímiles, es una lastima no poder contar con la versión integra que debe ser interesante, ya que la versión Campusa que da Hilaria Felipi, es recogida en un Cancionero y Romancero de prestigio como lo es el Andaluz, no acaban aquí las peculiaridades del romance ya que años más tarde lo encontramos convertido en plegaria a la Virgen de Gracia. Fatima. N. M. nos lo muestra tal y como ella lo aprendió de boca de su madre.

Plegaria a la Virgen de Gracia
Santa María de Gracia que estáis en el encinar, las bellotas son de oro y las hojas de cristal, y ese niño que lleváis de Egipto para Belén, en la mitad del camino, tenia sed. ¡Allá arriba en aquel alto hay un viejo naranjel¡ La virgen como era virgen, no cogió más que tres, el niño como era niño, todas las quería coger. Ese niño que tenéis, resplandece más que el sol, y disipa las tinieblas de nuestro corazón. El hijo de Dios vivo, proteja a Villa del Campo de todo mal desatino. tú eres madre santa y el tú divino hijo. Ora pronovis. Amén.

San José se retira desconsolado
No acaban aquí las canciones dictadas por Hilaria Felipi, Manrique de Lara entre otras le recogió, El Segador, La Bastarda, La Loba parda, La capea de los mozos de Monleón, Los bandidos y los arrieros, La Nochebuena explicar quiero y la hermosísima Guirnalda de rosas.
Existe otra grabación algo más reciente, realizada por un instituto de Coria, de la cual no hay certeza que esté publicada, quedando un poco en el ámbito privado o particular que atañe a sus más cercanos familiares.



                Este trabajo hubiera sido imposible sin la ayuda del convencidisimo anónimo que reavivó la búsqueda y me animó a seguir buscando. Gracias por tu tesón y trabajo. Gracias por no darte por vendido, por esa sabia nueva, que a buen seguro dará muchos frutos. E. Moreno.